La despiden por hacer seña obscena a Donald Trump

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Mientras pasaba una caravana que transportaba al presidente de los Estados Unidos, Juli Briskman, de 50 años, levantó el dedo medio para realizar una seña obscena. El gesto le valió su empleo.

Para su mala suerte, la mujer fue captada por el fotógrafo de prensa y los directivos de Akima decidieron quitarle su puesto de ejecutiva de marketing, aún cuando en la imagen aparece sin el uniforme de la compañía.

De acuerdo con fuentes locales, Juli sintió rabia de que el magnate fuera a jugar golf en medio de la emergencia nacional que sufría Puerto Rico a causa del huracán María y la matanza de Las Vegas.

Pero fue más allá cuando la fotografía comenzó a circular en redes sociales y la colocó como foto de perfil, provocando miles de reacciones y hasta amenazas de muerte en su contra. Resultó que su empresa había sido contratada por el gobierno federal.

La mujer fue despedida el pasado 31 de octubre por «violar el código de conducta». Según cuenta, sus jefes se molestaron tanto que sus acciones finales fueron motivadas por presiones sociales.